Las fluctuaciones en la bolsa de valores, así como los latidos del corazón de una persona sana, poseen características fractales, es decir: si observamos las fluctuaciones en una gráfica notamos que dentro de ellas hay más fluctuaciones a menor escala, a medida que nos acercamos podremos notar que se rigen siguiendo ciertos patrones que podrían predecir enfermedades del corazón, el movimiento de la bolsa de valores y demás sistemas complejos.